Un plato espectacular para una mesa de fiesta
Ingredientes
1 buey de mar cocido de 600/800g – 1 cebolla pequeña – 1 punta de pimiento rojo – 1 diente de ajo pequeño – 1 tomate pequeño pelado – 1 chorro de brandy – perejil fresco picado – 1/2 hoja de laurel – pan rallado – mantequilla – aceite de oliva virgen extra – pimienta blanca – sal
Retiramos toda la carne del caparazón, cuerpo y pinza, cuidando de que no queden cáscaras. Picamos con un cuchillo de manera gruesa y reservamos, así como los caparazones que limpiamos bien.
En una sartén amplia con un fondo de aceite sofreímos el ajo, cebolla y pimiento picados finos, así como la hoja de laurel muy picada con unas tijeras, con un poco de sal, hasta que estén bien hechos, unos 10 minutos. Incorporamos el tomate, pelado y picado y cocinamos cinco minutos más.
Flambeamos con el brandy y añadimos la carne de buey reservada, el perejil picado y pasamos cinco minutos. Ponemos a punto de sal y pimienta, y rellenamos los caparazones, que cubrimos con pan rallado y unos trozos de mantequilla.
Introducimos en el horno previamente calentado a 210ºC, con ambas placas y aire, durante unos 15 minutos, hasta que la superficie esté dorada. Dejamos templar unos minutos y servimos caliente.
oooOOOooo
Una versión personal del tradicional txangurro, pero que yo he preparado con buey de Francia, una opción bastante más económica aunque no tan sabrosa. Es un plato laborioso, para una mesa de fiesta, pero que a buen seguro gustará a todo el mundo, además de permitir comer marisco sin trabajar ni mancharse las manos.
Es muchísimo más fácil retirar la carne de una pieza recién cocida que aún no se ha enfriado completamente, y cuanto más grande sea, mejor. Será un trabajo enorme hacerlo con una pieza de las que se venden congeladas, ya que la carne se pega a las conchas y lleva muchísimo tiempo retirarla, además de desmigarse mucho más.
Debe estar conectado para enviar un comentario.